En Don Asado nos preocupamos por ofrecer a nuestros clientes la mejor comida casera de Albacete. Con una amplia carta de platos para que puedas elegir recetas tradicionales y al gusto de todos. Es el caso de las albóndigas, un plato típico y muy apreciado por la mayoría de los clientes. Populares por su forma redonda, su poderoso sabor e incluso su fama entre los más pequeños de la casa, las albóndigas suelen ser un plato muy demandado por los clientes de Don Asado. Pero, ¿sabias que suelen cocinarse en dos tiempos para darles un extra de sabor y textura? ¿Te gustaría conocer los trucos que hacen de las albóndigas caseras un plato de tanto éxito. ¡Sigue leyendo!
Los ingredientes clave en tus albóndigas caseras
Para preparar unas buenas albóndigas, como en cualquier otra receta, una buena materia prima es el punto de partida. Necesitarás los siguientes ingredientes:
- Carne: si bien hay quien aconseja mezclar carne de cerdo y ternera, en realidad no es necesario. Lo que sí hace falta es que parte de la mezcla sea magra y otro tanto, más pequeño, grasa. Es decir, un 80 % de un corte como aleta o aguja, y un 20 % de falda o lomo. Si tu carnicero de confianza puede pasarla dos veces por la máquina para una mezcla más homogénea, mejor que mejor.
- Huevo y pan rallado: aquí entran esos añadidos que te ayudarán a darles forma a tus albóndigas. Utiliza una yema de huevo por cada 250 gramos de carne y 25 gramos de pan rallado en la misma proporción. También puedes utilizar harina de trigo o de maíz, para un exterior más crujiente. Forma las albóndigas con ayuda de una balanza. Unos 25 a 35 gramos de peso será suficiente. Solo así garantizas que queden uniformes.
- Salsas y condimentos: aquí es donde puedes personalizar tus albóndigas. Si son guisadas en salsa, limítate a hierbas aromáticas, una pizca de pimienta y un chorrito de vino. ¡La sal va al momento de cocción! Si las comerás sin guiso, puedes experimentar con mostaza, otras salsas o con una pizca de semillas de cilantro.
Hora de ponerse manos a la obra en la preparación de las albóndigas
Si quieres que tus bolitas de carne sean inolvidables, deja que la carne se atempere alrededor de dos horas fuera de la nevera. Prepara la mezcla con yema de huevo, pan rallado y el aderezo de tu preferencia. Una vez que ya las tienes, sigue estos pasos:
- Para hacerlas en guiso o solas, lo primero es sofreírlas en un poco de aceite de oliva. Añade un diente de ajo, 15 gramos de mantequilla y una rama de romero a la sartén. Salpimienta y, con ayuda de una cuchara, baña las albóndigas con la mantequilla derretida.
- Una vez estén doradas, sácalas del fuego. En la misma fuente prepara la salsa. Una buena base sería media cebolla troceada, 300 gramos de tomate triturado, una pizca de orégano y de albahaca. Cocina a fuego medio hasta reducir y lograr un color rojo intenso. Una vez lista, devuelve las albóndigas a la cacerola para terminar su cocción.
- Si las prefieres sin salsa, prolonga el primer paso conforme le das vueltas hasta lograr un dorado uniforme. Luego sácalas del fuego y en la sartén aún caliente añade media taza de vino tinto. Deja reducir hasta la mitad, apaga el fuego y devuelve las bolas a la fuente para que se cocinen con el calor remanente.
¡El toque final depende de ti! Puedes acompañar las albóndigas caseras con trocitos de patata. Un buen puñado de perejil y albahaca fresca picados quedará espléndido sobre las bolitas de carne en salsa. Estas últimas acompañan a la perfección unos espaguetis. Con esta receta, no extrañarás nunca más la comida de tu madre. Tan solo basta asegurarse de tener buenos ingredientes y poner mimo en la preparación.
Así se traduce el cariño de tus seres queridos a través de la cocina casera. Eso es lo que procuramos en Don Asado, ofrecerte la mejor comida casera para llevar en Albacete. Naturalmente casera. Y de calidad. Mira en nuestra carta y elige los platos que más te gusten, ya sean unas albóndigas a domicilio en Albacete, un lomo empanado, un pisto de magra con huevos fritos, un arroz o un solomillo a la plancha.